BUSCA A DIOS EN TODAS LAS COSAS
“Muchos son los que dicen:
¿Quién nos mostrará el bien?
Alza sobre nosotros, oh Jehová,
la luz de tu rostro.
Tú diste alegría a mi corazón
mayor que la de ellos cuando
abundaba su grano y su mosto” (Salmo 4:6,7)
William Ames (1576-1633):
“El objetivo de éste salmo es enseñarnos con el ejemplo de David qué hacer en las dificultades de la vida.
El espera todo de Dios en cada momento que debe vivir.
Dios es su principal bien y la fuente de su felicidad, y esto lo hace fuerte y firme contra todas las circunstancias, y es un efectivo remedio contra las tristezas y temores.
David mantenía fija su mirada en éste principal bien, y no en las cosas terrenales.
La vida consiste en mirar fijamente a Dios como principal bien.
Quien vive confundido valorando las cosas de éste mundo como su principal bien, es atrapado por el miedo y la opresión. Y vive como un niño que menosprecia a las cosas de genuino valor para ocuparse de sus juguetes.
La felicidad del hombre no consiste en riquezas, honores, reconocimiento, poder, placeres, ni en ninguna otra cosa creada…
En muchos casos, mas bien, despiertan en el hombre pecado y miseria. Nada de eso debe ser nuestro último, principal y perfecto bien.
En éste pasaje encontramos el clamor:
'Alza sobre nosotros, oh Jehová,
la luz de tu rostro’.
Esto nos habla del acercamiento de Dios dándonos la capacidad de contemplarle, conocerle, experimentarle y deleitarnos en EL.
Es Dios mismo nuestro principal bien. Y es EL quien nos hace felices de manera absolutamente efectiva. Acercándose EL mismo hacia nosotros y, siendo así, EL mismo el objeto pleno de nuestra felicidad.
¡No existe nada más que pueda traer sana y sólida quietud y paz a nuestras almas o satisfacer lo más profundo e intimo del hombre!.
Cuan claramente se refleja esto en el Salmo 36:8: 'Serán completamente saciados de la grosura de tu casa’. Así como en el Salmo 63:5: 'Como de meollo y de grosura será saciada mi alma’.
Como intentar llenar la capacidad de una vasija grande con algo diminuto, así nada de éste mundo puede llenar nuestras almas.
Busca a Dios y la luz de Su rostro en todas las cosas, en cada circunstancia, en todo momento”.
(“The Substance of Christian Religion”)
0 comentarios:
Publicar un comentario