"Hizo proezas con su brazo" (Lucas 1:51).
Sin duda son atípicas, por llamarlas de alguna manera, las apariciones de los ángeles y las señales en torno al nacimiento del Mesías.
Quizás lo más "normal" en el relato es que "se le apareció un ángel del Señor" a Zacarías, sacerdote del templo (Lucas 1:8-11), para anunciarle que su esposa anciana ya (Lucas 1:18) y "estéril" (Lucas 1:7), tendría un hijo.
El, al menos era hombre y era parte del servicio del templo, escogido para la tarea privilegiada de "ofrecer el incienso" (Lucas 1:9).
Aunque hay algo a tener en cuenta: los rabinos judíos decían que hay siete personas que están privadas de la comunión con Dios, y la lista empezaba por un judío que no tiene esposa, o un judío que tiene esposa pero que no tiene ningún hijo.
"Los maestros judíos por lo general insistían en que el hombre se divorciara de una mujer sin hijos”
(Craig Keener - “Comentario del contexto cultural de la Biblia”).
Pero luego de esto encontramos que el ángel Gabriel visita a una mujer en un poblado despreciado como era Nazaret (Lucas 1:26-38).
Cabe recordar que al ser María una mujer y encima joven, en la cultura de su época no tenia ningún tipo de valor. Como regla general, solo las esposas de los rabinos recibían educación. De acuerdo con la legislación judía, las mujeres no podían ser testigos ni podían enseñar las leyes.
Ellas eran invisibles y no tenían poder alguno.
Las mujeres normalmente no podían dirigirse a los hombres en público, y mucho menos andar por los caminos con ellos.
María socialmente era una don nadie en medio de un pueblo insignificante.
Luego "un ángel del Señor le apareció en sueños" a un hombre pobre que vivía en Nazaret llamado José (Mateo 1:19-23), que luego al nacer el niño presenta en el templo la ofrenda de la clase más baja (Lucas 2:24; Levítico 12:8).
Posterior a esto "había unos pastores… y se les presentó un ángel" (Lucas 2:8-15) hablándoles del Señor.
La sociedad despreciaba a los pastores porque no podían cumplir todos los detalles de la ley ceremonial. No se podían lavar las manos meticulosamente, ni observar todos los otros preceptos y reglas.
“El trabajo de los pastores les impedía participar en las actividades religiosas de la comunidad”
(Craig Keener - “Comentario del contexto cultural de la Biblia”).
Por lo que eran muy despreciados.
Finalmente tenemos a un grupo de "magos" que "vinieron del Oriente" (Mateo 2:1). Estos eran muy probablemente astrónomos paganos ("Reformation Study Bible"), que seguían una estrella que decían haber visto en el cielo presagiando el nacimiento del "rey de los judíos" (Mateo 2:2).
Pero, convengamos que nada de esto es tan extraño como el hecho… realmente sorprendente... de que Jesús nos haya salvado a nosotros (Tito 3:-5), el Espíritu Santo habite en seres como nosotros (1 Corintios 6:19) y el Padre nos llame sus hijos (1 Juan 3:1).
¿O no?
Luis Rodas
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