La dictadura de los tolerantes

El progresismo actual, los liberales modernos, los "tolerantes" de hoy, no se cansan de pregonar el respeto a las diferencias, el relativismo de todas las cosas, que cada uno es libre de opinar lo que quiera, que no existe tal cosa como la verdad sino diferentes perspectivas respetables.

Pero, ahora es elegido, por la mitad de los estadounidenses, el señor Donald Trump como próximo presidente de su país, y salen a romper vidrios en las calles, insultar y a tachar de animales retrógrados a aquellos que lo votaron (puedes verlo aquí: http://edition.cnn.com/2016/11/09/politics/election-results-reaction-streets/index.html). Y proponiendo en los medios de comunicación diferentes planes de acción de cómo deberían de actuar a futuro para lograr imponer sus posturas de vida y el mundo cambie definitivamente según sus parámetros.

Aquí pueden ver al cineasta Michael Moore llamando "desgraciado, ignorante, payaso peligroso y sociópata" a Donald Trump, e instando a planes de acción a futuro ( http://ift.tt/2eYzMKy).

Y uno se pregunta: ¿Qué pasó con toda su doctrina de "viva la diferencia", "no hay verdades absolutas, sólo opiniones" y "respetemos a todos"?
¿Esto no demuestra que su "tolerancia" no es más que un "yo puedo pensar como quiera, pero tú no"?

Sin duda se trata de la dictadura de los "tolerantes", donde aquellos que quieren rebelarse a las normas establecidas por Dios, deben ser libres; pero los que sí quieren vivir acorde a ellas, deben ser odiados.

¿Quieres cortarle la vida a un niño a través del aborto?
¿Por qué no? Eres libre.
¿Quieres evitar la muerte de ese niño?
Eres un fascista, un intolerante, digno de ser encarcelado.
¿Tú no estás de acuerdo con ellos?
Eres una persona llena de odio.
¿Ellos te odian?
Ellos son luchadores por el bien.

Una dictadura que pregona sin cesar que ni existe Dios ni existen las verdades absolutas. Pero que luego con sus acciones muestran que si no piensas como ellos, no hay Dios fuera de ellos mismos y por tanto, tienen la prerrogativa de dictar verdades absolutas para todo ser que respira.

Si no hay un Dios superior (como dicen ellos), ¿quién tiene la autoridad para dictar qué es el bien y qué es el mal, qué es verdad y qué es mentira?
Si no hay un Dios superior (como dicen ellos), ¿quién puede atribuirse por sí mismo la supremacía de dictar soberanamente estas cosas sobre otros?


Luis Rodas



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