Gratitud es la voluntad de Dios en lo que estás viviendo CULTIVANDO UN CARÁCTER PIADOSO

“Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús” (1 Tesalonicenses 5:18).

 Una vez, luego de haber tenido una discusión con otra persona, le pedí al Señor poder actuar según Su voluntad en todo ese conflicto.
 Pensé en muchas formas en las que Dios podía guiarme específicamente para… bueno... en realidad decirle todo lo que yo quería decirle… ja...
Imaginé que encontraría esa dirección precisa en las Escrituras que me llevaría a endurecer mi corazón contra esa persona y así evitar el sufrimiento, pero… ¿sin sentirme culpable?…. jaja...

 Por el contrario, esa mañana, mientras oraba, de pronto resonaron en mi corazón estas palabras:
“Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros”.
 Y sí… Tan sencillo, tan profundo, tan decisivo….

 Más allá de una dirección específica para cada situación (lo cual por supuesto también necesitamos buscar en oración y estudio de las Escrituras), aquí está LA VOLUNTAD DE DIOS para eso que estamos atravesando:
“Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros”.

 Esa expresión, “en todo”, es uno de esos momentos en la Palabra de Dios que no nos permite la típica duda: “¿Se aplicará este versículo a mi situación?”
“En todo” incluye TODO lo que estoy viviendo en este día. TODO.
 Claro, no es lo único que debo hacer ante TODA situación, pero sin duda, NO puede faltar "en TODO" lo que me suceda hoy.
 ¿Por qué?
 Porque al hacerlo tengo seguridad y paz de que, en esa actitud, estoy actuando según lo que Dios quiere.

 ¿Tiene lógica agradecer a Dios aún por cosas que me cuestan aceptar?
 Sí, si comprendemos que "esta es la voluntad de Dios para con nosotros EN CRISTO JESÚS”.
 Todo lo que vivimos los que estamos EN CRISTO JESÚS es pura misericordia.

1-"No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados” (Salmo 103:10)
2- Tenemos la promesa inquebrantable de que TODAS las cosas que nos suceden a los que estamos en Cristo Jesús, serán dirigidas infaltablemente a terminar en algo bueno (Romanos 8:28).
 Ni tarde ni temprano. EN EL MOMENTO PERFECTO.


Luis Rodas


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