Ante tanta gracia, ¿qué haremos? CELEBRANDO A JESÚS

"En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él" (1 Juan 4:9).

Hace unos días estaba comprando algo en un negocio y se escuchaba de fondo la radio. El conductor del programa radial decía con respecto a "Navidad": "Repite conmigo", y sonaba una canción que anunciaba: "Vamos a pasarla bien".
¡Esto es lo que entiende mucha gente acerca de la "navidad".

La "Navidad" no es una fiesta de placer egoísta. Esto es lo exactamente opuesto a una celebración del nacimiento del Señor.
En nuestro caso como creyentes, si en esta fecha queremos hacer un recordatorio y celebración de Jesús, ¿podemos entender lo que decimos que estamos creyendo?
A los "aborrecibles" (Tito 3:3), a los "enemigos de Dios" (Romanos 5:10), los hizo no sólo propios, sino hijos.
"Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios" (1 Juan 3:1).
Que "el pueblo asentado en tinieblas vio gran luz" (Mateo 4:16).
Que Dios a los pecadores sin esperanza ahora les dice: "Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable, y yo te amé" (Isaías 43:4).
Cumpliendo así su promesa inamovible: "Os amaré de pura gracia" (Oseas 14:4).
Hace alrededor de 2000 años el ángel le dijo a los pastores: "No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor" (Lucas 2:10,11).
María anunció: "Porque me ha hecho grandes cosas el Poderoso; Santo es su nombre, y su misericordia es de generación en generación a los que le temen. Hizo proezas con su brazo" (Lucas 1:49-51).

Todo esto no es SÓLO para celabrarlo con gozo y gratitud.
Ante tanta gracia, ¿cerraremos nuestros corazones a otros?
O la navidad es un tiempo donde amamos al otro, o ahí sí, es el peor paganismo:
"Conocemos lo que es el amor verdadero, porque Jesús entregó su vida por nosotros. De manera que nosotros también tenemos que dar la vida por nuestros hermanos. Si alguien tiene suficiente dinero para vivir bien y ve a un hermano en necesidad pero no le muestra compasión, ¿cómo puede estar el amor de Dios en esa persona?
Queridos hijos, que nuestro amor no quede solo en palabras; mostremos la verdad por medio de nuestras acciones. Nuestras acciones demostrarán que pertenecemos a la verdad" (1 Juan 3:16-21 - NTV).

Que el Señor los bendiga con un hermoso tiempo glorificándole y amando a otros en esta Navidad.


Luis Rodas


.