Continuamos con el Salmo 15.
A esta altura todos recordamos que este Salmo contiene una pregunta de David a Dios (el primer verso): "Dios, ¿cómo alguien puede perseverar en comunión intima contigo diariamente?”
A lo que vimos hasta ahora que Dios le responde en los versos siguientes:
- integridad
- practicas, hábitos, de justicia
- guardar nuestros corazones con toda sinceridad
- no calumniar
- no hacer daño
- no criticar ni recibir criticas sin fundamento hacia otros
Con respecto a esto último, dicen que Agustín tenía escrito en su escritorio:
“Aquel a quien le gusta difamar al ausente,
sepa que en esta mesa no puede estar presente” (citado por “El Tesoro de David”. Ch. Spurgeon. Pag. 94).
Pero hoy entramos en el verso 4:
Salmo 15:4 "Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado,
Pero honra a los que temen a Jehová.
El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia".
¡Vaya declaración polémica para el mundo de hoy!
Hay una agenda mundial que busca meter más y más la idea personalísima de “inclusión”, “igualdad”, “tolerancia” y “paz”.
Palabras tergiversadas que en síntesis forman una sociedad que borra la línea divisoria entre el bien y el mal, fomenta el pecado en nuestros hijos en el colegio a través de lo que llaman “educación sexual” pero que no es otra cosa que decirle a nuestros niños que todo lo que quieran hacer sexualmente está bien, y un despertar cosas que aún no están preparados para vivir; se trata de un aborrecer toda verdad de la Palabra de Dios, y preparar el camino para que, pronto, decir que Jesús es la única vía de salvación sea fundamentalismo peligroso. Inclusión incluye a todos menos a aquellos que creemos que hay una sola verdad (la Palabra de Dios) y un sólo camino (Jesucristo), tolerancia incluye a todos menos a aquellos que respetamos a los que quieren vivir en pecado, pero que no podemos dejar de decir que se trata de adulterio, depravación, fornicación, etc, etc…
Hace unos días la hija pequeña de un pastor de esta ciudad volvió llorando por las cosas que le hablaron de sexualidad en el colegio.
En medio de "hombres famosos" de la Iglesia evangélica como Marcos Witt, Rick Warren, Joel Osteen, Jesús Adrián Romero y cientos más, que en nombre de "Jesús no es religión, sino una relación”, quitan toda verdad de la Palabra de Dios de en medio, a la santidad le llaman “legalismo” y se termina pareciendo más al amigo imaginario que tienen algunos niños, que al Dios de las Escrituras.
En medio de un mundo, con una agenda común, que grita “nadie puede decir que alguien está equivocado en su forma de vivir. Todos son puntos diferentes de vivir la vida. Si acusas a alguien de pecador tú lo estás discriminando, menospreciando… Y por lo tanto tú eres peligroso para nuestra sociedad”.
En medio de todo esto nos encontramos con el verso 4 de este Salmo 15.
Dios dice: “¿Quieres permanecer en comunión intima conmigo?
Esto es necesario: Ser como
Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado,
pero honra a los que temen a Dios”.
Aquí tenemos un mensaje de Dios que desune. Fomenta la desunión con unos y la unión con otros.
La desunión con el “vil”: "Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado”
Y la unión con el que quiere agradar a Dios:
"pero honra a los que temen a Dios”.
¿Dios fomentando la desunión de la humanidad?
¿Podrá ser?
¿No quiere Dios que toda la raza humana esté unida?
¿No es Jesús el rey de la tolerancia, la unidad, la inclusión y el aceptar a todos?
Bueno, al menos hoy es lo que se dice.
El año pasado, el Papa Francisco de la iglesia Católica, en una homilía dijo: "El Señor nos redimió a todos nosotros, a todos nosotros, con la Sangre de Cristo; a todos nosotros, no solo a los católicos. A todos”.
“’Padre, ¿y los ateos?’ Incluso los ateos. ¡Todos!”, afirmó.(http://mexico.cnn.com/salud/2013/05/26/el-papa-francisco-abre-las-puertas-del-cielo-para-los-ateos).
A esto agregó:
“Los discípulos de Jesús eran un poco intolerantes… Pero el Señor ha construido los puentes” (http://www.clarin.com/mundo/Papa-defiende-ateos-erradicar-intolerancia_0_925707594.html)
Este es un Jesús que lo único que busca es unir a la humanidad. No importa lo que crean, piensen, hagan o digan. ¡El lo tolera todo y no rechaza a nadie!
Busquemos un poco a este Jesús en los evangelios:
Muchos judíos rechazaban a Jesús. ¿Qué hace EL? ¿Extiende un lindo puente de tolerancia y unidad?:
Juan 8:41-44 "Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. Entonces le dijeron: Nosotros no somos nacidos de fornicación; un padre tenemos, que es Dios.
Jesús entonces les dijo: Si vuestro padre fuese Dios, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que él me envió.
¿Por qué no entendéis mi lenguaje? Porque no podéis escuchar mi palabra.
Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira".
En Mateo 7:23, Jesús a ciertas personas que decían seguirle pero que no hacían la voluntad de Dios, les dice: “Apartaos de mí, hacedores de maldad”.
En Mateo 25:41 llama a ciertas personas “cabritos” y anuncia que les dirá: “Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno”.
En Lucas 19:27 dice Jesús que un día dirá sobre aquellos que se rebelan a EL: “a mis enemigos que no querían que yo reinase sobre ellos, traedlos acá, y decapitadlos delante de mí”.
Veamos si el propósito principal de Jesús fue traer la unidad de toda la humanidad crean lo que crean y vivan como vivan:
Mateo 10:34-36 "No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada. Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre serán los de su casa".
Por supuesto no se refiere a no amar al perdido, no se refiere a no amar a nuestros familiares incrédulos y buscar su salvación, no se refiere a no respetar la elección que hacen otras personas de su forma de vida (cada uno elige), no se refiere a ejercer ningún tipo de violencia contra el pecador, no se refiere a dejar de predicarle el evangelio al incrédulo. ¡NO!
Pero sí se refiere a que el mundo aborrece a Cristo y a sus seguidores. Jesús dijo: “Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me han aborrecido antes que a vosotros” (Juan 15:18).
Nosotros queremos unidad pero no a costa de negar la verdad ni a Cristo.
Mañana continuamos...
Luis Rodas
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