LA COMUNIÓN INTIMA CON DIOS Y LA CALUMNIA 1ª parte



Continuamos con el Salmo 15 y hoy sí, luego de haber profundizado un poco en los remedios para los pecados de nuestra lengua, vamos a tratar puntualmente lo que habla el verso 3 de este Salmo:
Salmo 15:1-3 "Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo?
¿Quién morará en tu monte santo?
El que anda en integridad y hace justicia,
Y habla verdad en su corazón.
El que no calumnia con su lengua,
Ni hace mal a su prójimo,
Ni admite reproche alguno contra su vecino".

Aquí Dios le responde a David que una parte esencial para permanecer en comunión intima con EL es “NO calumniar con la lengua”.

“calumnia” (“ragál” en hebreo): es interesante que esta palabra se puede traducir tanto como “espiar”, como “calumniar”.
El contexto define a que se refiere. Pero estas dos palabras en castellano pueden ir entrelazadas.
Aquí Dios nos habla de una actitud que bloquea la comunión intima con EL: es la de la persona que se toma tiempo para investigar a otra y así hablar falsamente contra ella.

Un ejemplo profundo de esta actitud lo encontramos en el Salmo 64:2:
"Escóndeme del consejo secreto de los malignos,
De la conspiración de los que hacen iniquidad".
“consejo secreto”: esto nos habla de una reunión de dos o más personas que hablan en secreto contra otro que no está.
“de la conspiración”: al hablar mal contra esa persona se envenenan de tal manera que la contaminación va subiendo y comienzan a tramar que harán con él.

Uno le dice al otro: “ja… yo lo voy a poner en su lugar…”. El otro dice: “se lo merece… Todos creen que es un santito, mmm… yo lo voy a desenmascarar”….:
Salmo 64:3 "Que afilan como espada su lengua; Lanzan cual saeta suya, palabra amarga".
¿Qué va a hacer una “espada” afilada?. Herir, dañar, matar….
¿Qué va a hacer una “saeta” y una “palabra amarga”? Herir, dañar, matar….

Pero ahí están comiendo rabia y espumando por su boca.

Y uno dice: “yo esto lo tengo que hablar… otros tienen que saber que clase de persona es de la que estamos hablando”.
Y saben…. en vez de ir y hablar con la persona cara a cara, ahí van sembrando su veneno. Se acercan a uno y a otro pasando por pobres víctimas y hasta por dulces hermanos preocupados por el bien.
Sollozando: “Yo te lo hablo porque estoy preocupado por ti. Despierta… Ten cuidado con esta persona!!!!”
O, un familiar carnal: “oh… no te lo hablo porque quiera criticarlo…. ¡NO!…. es que quiero su bien y ya no se a quien pedirle ayuda…. oh…. El es terrible…. Y es….”…. y ahí comienza a vomitar tanto odio y critica para llenar el Océano Pacífico…
En el Salmo 41 David profetiza. Y habla como si fuera Jesús mismo contando. Y dice: “reunidos murmuran contra mí todos los que me aborrecen” (Salmo 41:7)

Salmo 64:4 "Para asaetear a escondidas al íntegro; De repente lo asaetean, y no temen".
Y ya saben: internet es perfecto también para esto. Si aparece en internet es verdad, ¿no es así?…
Cualquiera puede hablar de cualquiera y es tenido en cuenta. Antes éste tipo de personas eran identificadas rápidamente y no tenían más lugar para vomitar su veneno que tal vez la cocina de alguna casa.
Hoy internet lo permite todo. Desde proveernos de material rico en sana doctrina a que vaya a saber quien “asaetea a escondidas al integro” (64:4) sin ningún temor.

Personas así no quieren saber la verdad, sólo quieren que alguien les diga cosas malas de ti. Están buscando alguien que habla pestes de ti. No importa si es verdad o mentira. Tú ya eres culpable antes de comenzar la investigación. Sólo se necesita alguien que esté dispuesto a decirlo.
Se trata de una obstinación por el odio que te tienen:
Salmo 64:5 "Obstinados en su inicuo designio, Tratan de esconder los lazos, Y dicen: ¿Quién los ha de ver?"

Esto lo hicieron con Jesús. No les importaba saber si Jesús era quien decía que era o si era un engañador. Ellos no investigaban para saber la verdad. Querían supuestos testigos para acusarle.

Por eso esta palabra hebrea (“ragál”) es tan interesante. Entrelaza las palabras castellanas de “espiar” y “calumniar”.
Mira como lo espiaban a Jesús:
Mateo 12:10 "Y he aquí había allí uno que tenía seca una mano; y preguntaron a Jesús, para poder acusarle: ¿Es lícito sanar en el día de reposo?"
¿Te imaginas?
Conozco el caso de una persona que cita a otra en su casa diciendo que estaba muy preocupada. Pero ¿que había hecho? Tenía encendido un dispositivo para grabar.
¿Para qué?
Para ver si encontraba alguna palabra, alguna cosita, alguna frase terrible…. para poder acusarla….

¿Te das cuenta cuanta maldad puede tener un corazón así?….:
Lucas 11:53,54 "Diciéndoles él estas cosas, los escribas y los fariseos comenzaron a estrecharle en gran manera, y a provocarle a que hablase de muchas cosas; acechándole, y procurando cazar alguna palabra de su boca para acusarle".

A Jesús le preguntaban “para poder acusarle” (Mateo 12:10).

Estaban expectantes para encontrar algo malo en EL:
Marcos 3:2 "Y le acechaban para ver si en el día de reposo[a] le sanaría, a fin de poder acusarle".
Lo mismo en Lucas 6:7 “Y le acechaban los escribas y fariseos, para ver si en el día de reposo lo sanaría (a un hombre con la mano seca), a fin de hallar de qué acusarle”.

El juicio ya está terminado sólo se necesita alguna prueba, falsa o no, para poder llevar a cabo la condena.
“Ya voy a encontrar pruebas… y voy a demostrar quien es…”.
Está claro, no tiene ninguna prueba de lo que dice, pero en su corazón ya estás condenado. Y va a recorrer cielo, mar y tierra con tal de conseguir una excusa para demostrar que su odio fue puesto por Dios.
Esto lo hacían con Jesús:
Mateo 26:59,60 "Y los principales sacerdotes y los ancianos y todo el concilio, buscaban falso testimonio contra Jesús, para entregarle a la muerte, y no lo hallaron, aunque muchos testigos falsos se presentaban. Pero al fin vinieron dos testigos falsos".

Si lo hicieron con Jesús, ¿no te lo harán a ti?


Luis Rodas


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