El ser humano se rebeló a Dios, entró en exilio y se esclavizó a Satanás, el pecado y la muerte; y con él trajo la tragedia a toda la creación.
¡Pero Dios salió al rescate!Si hay gente que tiene que manifestar esto, es la Iglesia. ¡Sin duda! Porque en la Iglesia Dios empezó lo que va a manifestar en toda la creación: “La restauración de todas las cosas” de la que habló Pedro en Hechos 3:21.
En los creyentes se ve el amor, buscan la paz, la unidad, la misericordia, el gozo, están llenos de esperanza, es imposible ver a un creyente y no disfrutar la luz del evangelio, pasas un tiempo con ellos y sales fortalecido, animado, con ganas de mirar hacia adelante y compartir lo que tienes, con todo el mundo.
¡En Cristo, Dios salió al rescate!
Por personas específicas, familias, todo un pueblo, hombres y mujeres de toda nación, y por toda la creación.
Jesús es el cumplimiento de Isaías 35:4: “Dios mismo vendrá, y os salvará”.
¡Dios mismo es el Rescatador que necesitamos!
EL es “el que RESCATA del hoyo tu vida” (Salmo 103:4).
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