PLENA SATISFACCIÓN Y CONTENTAMIENTO. Primeros pensamientos del día.

“Oh alma mía, dijiste a Jehová:

Tú eres mi Señor;

no hay para mí bien fuera de ti” (Salmo 16:2)

Richard Baxter (1615-1691):

“Dios es nuestro Absoluto Señor, nuestro Dueño, nuestro más justo Gobernador y el más abundante Benefactor.

Nuestro caminar con Dios incluye nuestra estima y entendimiento de EL como supremo fin y felicidad de nuestra alma.

Dios no debe ser buscado o amado como un medio para conseguir algún gran 'bien'.¡NO!. No existe un más grande ‘bien' que EL mismo.

Su bondad debe ser el atractivo más grande para acercarnos a EL. Su favor debe ser valorado como nuestra felicidad.Y el agradarle debe ser nuestra ocupación más esforzada.

El ateísmo práctico es vivir ‘sin Dios en el mundo’ (Efesios 2:12).

La piedad es contraria al ateísmo práctico, ya que es vivir con Dios y para Dios en el mundo.

De forma primordial, principal, fundamental, vivimos para Dios. Para agradarle, glorificarle y disfrutarle.

‘Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí. Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos. Porque Cristo para esto murió y resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así de los muertos como de los que viven’ (Romanos 14:7-9).

Por tanto nuestro caminar con Dios es un serio ‘procurar, o ausentes o presentes, serle agradables’ (2 Corintios 5:9).

Para esto el amor de nuestro Redentor debe constreñirnos: ‘Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron; y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos’ (2 Corintios 5:14,15).

Por tanto, si tu anhelas caminar con Dios, EL debe ser tu meta, el premio, el tesoro, la felicidad, el cielo mismo cual ansías y buscas.

Como la vida de un hombre codicioso busca honor y aplausos del mundo, así la vida del hombre que vive para Dios busca agradarle, honrarle y disfrutarle.

¡Esto es vivir para Dios como nuestro fin y nuestro TODO!.

Al vivir de esta forma, como resultado el hombre alcanza plena satisfacción y contentamiento"

(“Walking with God”).

Luis Rodas