Salmo 8:1 “Señor nuestro... en toda la tierra”.
Aquí, en un verso, tenemos la bendita verdad equilibrada.
En un sentido es “Señor nuestro” y en otro sentido “cuan glorioso es tu nombre en toda la tierra”.
Nuestro Señor es el Dios de toda la tierra.
John Piper: “EL no es un dios tribal o deidad territorial; EL es majestuoso y supremo sobre toda la tierra y su esplendor es sobre los cielos” (predicación “What is man?”).
Nuestro Señor no es un dios entre muchos o solo una creencia personal.
A veces sin darnos cuenta tenemos la perspectiva de un dios tribal.
Las tribus, que aun existen, en muchos casos, tienen cada una su dios.
La tribu tal adora al dios tal. La tribu no se cuanto adora al dios no se cuanto.
Y cada una hace sus rituales específicos que supuestamente le agradan a su dios.
Y cada tribu espera de su dios las cosas necesarias para cada año.
Por ejemplo los Wichís en el norte argentino con la Pachamama o en Bolivia con la Virgen de Urkupiña.
A veces sin darnos cuenta nosotros tenemos la perspectiva de un dios tribal. Y nuestro “dios tribal” es un Dios en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Sin darnos cuenta tenemos la perspectiva de que EL es nuestro Dios, que influye en nuestras vidas, pero que lo hace porque somos la tribu que adora a ese Dios. Pero que las demás tribus adoran a otros dioses y nuestro Dios no influye en absoluto en sus vidas.
¿Quién le dio el talento a los artistas o deportistas que lo están usando para su propia gloria y beneficio?
¿Dios o Satanás?
¿Dios bendice a un impío?
¿Dios guarda de ciertos males a gente que jamás fue a la Iglesia?
¿En cierto sentido, Dios tiene misericordia de toda la humanidad?
En cierto sentido Dios es solamente el Dios de los salvos.
Pero en otro sentido, Dios no es solo el Dios de nuestra “tribu”.
En cierto sentido Dios es solamente el Dios de los que están en Cristo, y el resto son de “su padre el diablo” (Juan 8:44).
Pero en otro sentido, y presten atención a la frase que dije: “en otro sentido”, Dios es el Dios de toda la tierra: Salmo 47:2,7.
Daniel 4:34,35 (Nabucodonosor, al volver en sí) "Mas al fin del tiempo yo Nabucodonosor alcé mis ojos al cielo, y mi razón me fue devuelta; y bendije al Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por todas las edades.
Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces?"
(.Números 16:22; 27:16; 1 Crónicas 29:11,12).
Millones de personas se mantienen en rebeldía contra Dios y el Señor de toda la tierra los va a enviar al infierno por la eternidad como lo vimos el domingo pasado.
Filipenses 3:19 “cuyo dios es el vientre”
Ellos son “los hombres mundanos, cuya porción la tienen en esta vida” (Salmo 17:14).
Pero cuando la Biblia habla de esta manera se está enfocando en la rebeldía de ellos al “Único Dios verdadero” .
Mientras que en otros pasajes simplemente comunica la verdad: NO hay otro Dios fuera nuestro Dios:
(Isaías 45:5,6,22; 46:9,10; 40:22-26; 1 Timoteo 6:15; 1 Corintios 8:4).
Por eso Jesús habló del “Dios único” (Juan 5:44) y del “Único Dios verdadero” (Juan 17:3).
Y Pablo le describió como “el Único y Sabio Dios” (Romanos 16:27 y 1 Timoteo 1:17).
Y Judas habló de “Dios el Único Soberano” (Judas 4).
El resto son dioses falsos. De Jehová es TODO:
Salmo 24:1 "De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan".
Salmo 86:8-10 "Oh Señor, ninguno hay como tú entre los dioses,
Ni obras que igualen tus obras. Todas las naciones que hiciste vendrán y adorarán delante de ti, Señor, Y glorificarán tu nombre.
Porque tú eres grande, y hacedor de maravillas; Sólo tú eres Dios".
Por eso tan hermosamente el Salmo que nos toca hoy dice:
Salmo 8:1 "¡Oh Jehová, Señor nuestro, Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra! Has puesto tu gloria sobre los cielos".
Es un Dios que muestra sus maravillas, su hermosura, su virtud, en toda la creación, constantemente.
El impío se pierde, no porque no haya pruebas de la existencia de Dios (Romanos 1:18-32), no porque Dios no le muestre su misericordia constantemente en todo, sino por su rebeldía empedernida.
Dios derramó, derrama y derramará su misericordia gratuita sobre la tierra de manera que no podemos medir.
No hay criatura que no disfrute en cada momento la misericordia de Dios.
La misericordia de Dios llena la tierra: Salmo 119:64
De sus beneficios está llena la tierra: Salmo 104:24
Salmo 145:9
Juan Calvino: “No hay criatura alguna sobre la cual su misericordia no se haya derramado” (“Institución de la religión cristiana”. Pag. 19).
“Debemos confesar que en cada una de las obras de Dios, y principalmente en el mundo, están pintadas, como en una tabla, las virtudes y poder de Dios, por las cuales todo el linaje humano es convidado y atraído a conocer a este Gran Artífice y de aquí a la verdadera y perfecta felicidad” (“Institución de la religión cristiana”. Pag. 15).
Mañana seguiremos hablando de esto...
Luis Rodas
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